jueves, 11 de marzo de 2010

La famosa demagogia

Hoy me cruce con ella y me advirtieron que es mejor no acercarse.
Mucho había oído de su existencia, sobre todo para echar por tierra argumentos, en la mayoría de los casos contrarios a nuestra opinión, pero ese no es su cometido.

Según la Real Academia de la Lengua Española (la biblia de los trabajadores de las palabras):

1. Práctica política consistente en ganarse con halagos el favor popular.

2. Degeneración de la democracia, consistente en que los políticos, mediante concesiones y halagos a los sentimientos elementales de los ciudadanos, tratan de conseguir o mantener el poder.

La otra alternativa la encontramos en el Diccionario Maria Moliner, que se puede consultar online:

1. *Gobierno por la plebe.

2. ("Hacer") Práctica política, que puede manifestarse, por ejemplo, en un discurso, que tiene como fin predominante agradar o exaltar a las masas, generalmente con medios poco lícitos.

Como vemos algo que en origen era propio de la política ha traspasado esas lindes. Ahora cuando un periodista da su opinión en cierto modo trata de persuadir al lector, al igual que el político en un mitin. Para ello en ocasiones puede usar argumentos que traten de “emocionar” a la parte que le interesa, pero tanto es así que ese sentimiento puede volverse en su contra si esos argumentos no son del todo válidos, haciendo así demagogia.
Algunas formas de demagogia son el falso dilema, las falacias, la omisión, la estadística fuera de contexto, la modificación del lenguaje y significado o la táctica del despiste.

Tras el apunte creo que más me vale mantenerme alejada de la susodicha, pues no creo que sea muy buena influencia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...